A Coruña, ciudad herculina, también conocida como “la ciudad de cristal” por las emblemáticas galerías que adornan los edificios con vistas al puerto, se caracteriza por ser una pequeña península de tierra rodeada de mar por casi los cuatro costados. El carácter acogedor de los coruñeses, el pulpo á feira y tener uno de los paseos marítimos más largo de Europa (nada menos que 113 kilómetros) hace de esta ciudad un lugar dónde querer quedarse. Además, alberga el faro romano más antiguo en funcionamiento, la Torre de Hércules, desde dónde puedes admirar la belleza del océano Atlántico y ver cómo las olas rompen en los enormes acantilados.
A Coruña es un privilegio para nuestros sentidos.