La capital aragonesa posee atractivos de sobra para satisfacer a los más exigentes, sin importar si el visitante es un amante del patrimonio, la historia, la cultura o la gastronomía. Una riqueza que, además, se multiplica si incluimos en la lista de actividades una excursión cercana a alguno de los muchos lugares que se pueden visitar desde la ciudad en apenas hora u hora y media. Estos son algunos de los más interesantes, ¡pero hay muchos más!
1. Monasterio de Piedra
Situado cerca de la localidad de Nuévalos, a apenas una hora y veinte minutos de la capital, este monasterio cisterciense está enclavado en el corazón del Parque Natural del mismo nombre, y su entorno es una maravilla de la naturaleza que atrae a miles de visitantes cada año. Este antiguo cenobio fue fundado en la Edad Media por monjes del Císter, que escogieron la ubicación por sus hermosos y apacibles paisajes, plagados de cascadas, corrientes de agua y grutas. Un auténtico oasis escondido en las sierras del Sistema Ibérico.
Gruta Iris, uno de los rincones más hermosos del monasterio de Piedra.
2. Tarazona
Frontera entre los reinos de Aragón y Castilla durante siglos, esta pintoresca localidad (a una hora de Zaragoza) fue a lo largo de varias centurias un enclave de importancia capital para la historia de España. Como testimonio de aquel rico pasado, Tarazona conserva numerosas muestras de patrimonio, como la catedral de Nuestra Señora de la Huerta –un magnífico templo en el que se entremezclan los estilos gótico, mudéjar y renacentista–, el Palacio Episcopal o el barrio de la judería, entre otros muchos. Además, a sólo 15 minutos de allí se encuentra el monasterio de Veruela, donde se alojó el poeta y novelista romántico Gustavo Adolfo Bécquer.
Interior de la catedral de Santa María de la Huerta, en Tarazona.
3. Sos del Rey Católico
Este pequeño pueblo de la comarca de las Cinco Villas, situado a una hora y media de la capital, debe su nombre a Fernando II de Aragón, que nació en uno de los inmuebles de la localidad, el Palacio de Sada. Pasear por el laberinto que forman sus calles constituye un auténtico viaje en el tiempo, durante el cual podemos descubrir maravillas como la iglesia de San Esteban, la Casa de la Villa o el castillo de la Peña Feliciana. Es una de las localidades que forma parte de la iniciativa Pueblos más bonitos de España, y la belleza de sus calles sedujo a Luis García Berlanga, que rodó aquí La vaquilla, uno de sus filmes más recordados. Más información: Turismo de Sos
Calles de Sos del Rey Católico.
4. Pueblo Viejo de Belchite
Belchite ha pasado a la historia por un triste episodio ocurrido durante la guerra civil española, ya que fue escenario de una cruenta batalla en la que perdieron la vida casi cinco mil personas. La contienda dejó buena parte del pueblo en ruinas, por lo que tras la guerra se decidió construir uno nuevo en las proximidades, quedando el original como testimonio de aquella terrible batalla. Hoy es posible visitar sus ruinas gracias a las diferentes visitas guiadas que organiza el Ayuntamiento.
Ruinas de la iglesia del Pueblo Viejo de Belchite.
5. Monasterio de Rueda
Situado entre las localidades de Sástago y Escatrón, a una hora y media de viaje desde Zaragoza, este cenobio es el tercer monasterio cisterciense de la provincia. Fue construido durante los siglos XIII y XIV en estilo gótico y mudéjar, y en la actualidad su hermoso claustro, su iglesia y sus distintas estancias pueden descubrirse durante las visitas guiadas que organiza Turismo de Aragón. Además, cuenta con una hospedería y un restaurante capaz de satisfacer a los más exigentes.
6. Castillo de Loarre y Alquézar
Ya en la vecina provincia de Huesca, aunque a sólo una hora de viaje, se encuentra el espectacular castillo de Loarre, una fortaleza románica del siglo XI que puede presumir de ser la mejor conservada del mundo. Esta atalaya, donde se rodó parte del film El reino de los cielos, de Ridley Scott, ofrece unas vistas impresionantes de la Hoya de Huesca. También en la provincia oscense, a una hora y media desde Zaragoza, descubrimos el pueblo medieval de Alquézar, una hermosa localidad de la comarca del Somontano, que destaca por sus pintorescas casas apiñadas en las faldas de una colina. Además del castillo y de la bella colegiata, la población cuenta también con un imponente paisaje natural, en el que destacan los cañones del río Vero.
Vista del espectacular castillo de Loarre, en la provincia de Huesca.
Vista del pueblo de Alquézar, levantado sobre una colina del Somontano.